Esta tarde hice un relleno para empanadillas y me quedó un poco, también algunas obleas y me dije...¡Hago unas tartaletas! y aquí están en poquito tiempo un aperitivo estupendo.
Las obleas las puse en moldes de silicona individuales y las metí al horno a 180º unos 10 minutos, desamoldé y me dispuse a llenarlas con lo sobrante de las empanadillas y otras con queso philadelphia mezclado con trocitos de aceituna.
Las tartaletas se pueden llenar con lo que mas os guste o como en mi caso con un resto que quizás terminariamos tirando.
¡Ah! Las obleas son de La cocinera.